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Ataque Cerebral

Padecimiento

Ataque cerebral (Otros nombres: Accidente cerebrovascular, ACV, Apoplejía)


Sucede cuando se obstruye el flujo sanguíneo a nivel cerebral. Al no poder recibir el oxígeno y nutrientes que necesitan, las células cerebrales comienzan a morir en minutos. Esto puede causar un daño severo al cerebro y discapacidad permanente o grave a largo plazo. El ataque cerebral es la quinta principal causa de muerte en los Estados Unidos.

Tipos de Accidente Cerebro vascular

Hay dos tipos de ataques cerebrales: El accidente cerebrovascular isquémico es causado por un coágulo de sangre que bloquea o tapa un vaso sanguíneo en el cerebro. Es el tipo más común, un 80 por ciento de los ataques cerebrales son isquémicos. El accidente cerebrovascular hemorrágico es causado por un vaso sanguíneo que se rompe y sangra en el cerebro

Síntomas

Los síntomas del accidente cerebrovascular ocurren a menudo rápidamente. Estos incluyen: Entumecimiento o debilidad repentina de la cara, brazo o la pierna (especialmente a un lado del cuerpo), confusión repentina, dificultad para hablar o para entender el habla, problemas repentinos para ver con uno o ambos ojos, dificultad repentina para caminar, mareos, pérdida del equilibrio o coordinación y dolor de cabeza severo y repentino sin causa conocida

Prevención y control

Las personas mayores de 55 años de edad tienen más posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular y el riesgo aumenta a medida a mayor edad. Otros factores de riesgo mayores relacionados con una alta incidencia de padecer ataque cerebral son: presión arterial alta, enfermedades del corazón, fumar, familiares con antecedentes de ataque cerebral, y etnia afroamericana.

Las personas que han tenido un accidente cerebrovascular o está en riesgo de tener uno y quiere prevenirlo en el futuro, puede hacer algunos cambios saludables en su estilo de vida como: comer una dieta saludable para el corazón, lograr un peso saludable ,manejar el estrés, hacer actividad física regular, dejar de fumar y controlar su presión arterial alta y los niveles de colesterol. Si estos cambios no son suficientes, es posible que necesite medicamentos para controlar sus factores de riesgo.